Domingo 25 de Abril
"Adios a un peregrino, en tierra de golmajos"
Al estar los cuatro solos en una habitación y por miedo a no despertarnos, ponemos el despertador a las 05:45h.,
salimos del albergue a las 06:35h, es prácticamente de noche, las luces del pueblo aún están encendidas y hace un fresquito muy agradable.
Tomamos el camino con buena marcha, la etapa de hoy es un constante sube y baja, un
auténtico reompe-piernas, a las 10:30 h. llegamos a Viana, antes hemos pasado por Sansol y Torres del Río. En Viana paramos en un bar para tomar un refresco, el día es soleado y la temperatura agradable.
Hoy es el último día del camino para
Entramos en la Comunidad de La Rioja y seguimos hacia Logroño, en donde entramos junto a un montón de gente que vienen de realizar una marcha.
Tras cruzar el Puente de Piedra llegamos al Albergue de la Asociación de Amigos del Camino, allí nos instalamos , en ducharnos nos vamos a comer.
Salimos a la calle, la ciudad está animadísima, en la plaza una banda toca la pegadiza canción: “La chica del diecisiete”
“La chica del diecisiete de la plazuela del tribulete
Nos tiene con sus toilettes revuelta
La
A donde va la chica tan bien plantá
Por eso a las vecinas les da por murmurar
Y al verla tan compuesta le dicen al pasar
Donde se mete la chica del diecisiete
De donde saca pa tanto como destaca
Pero ella dice al verlas en ese plan
La que quiera coger peces que se moje el rantamplan….”
Está melodía nos acompañará durante todo el camino.
Buscando el restaurante pasamos por una Golmajería.
La golmajería, es como se llama a la repostería en La Rioja, ya que toda buena comida debe concluir con un buen postre. No hay que olvidar que en riojano un goloso es un golmajo. En La Rioja, los dulces son golmajería, vocablo de raíz árabe, que conserva en sus recetas reminiscencias musulmanas. Esta tradición repostera que reserva un papel relevante a la almendra, proviene de los antiguos molinos y hornos de pan medievales.
Nos vamos a comer al Restaurante La Campana, allí tomamos unos garbanzos y unas patatas a la riojana, que no se las salta un galgo, también probamos las madejas de cordero que aquí llaman de otra forma. Hacemos una sobremesa larga y regresamos al albergue donde ya nos despedimos definitivamente de
Dedicamos un buen rato a descansar, escribiendo, leyendo o haciendo sudokus, luego nos vamos a dar una vuelta por la ciudad. Logroño ha crecido muchísimo, en la actualidad supera los 150.000 habitantes.
Visitamos la catedral de Santa María la Redonda, paseamos por las calles y callejas y, ¡como no!,
nos acercamos a la Calle del Laurel a tomar unas tapitas.
En cuanto a la hora de ir a dormir, definitivamente hoy nos pasamos, a las nueve ya nos metemos en la cama pero hasta las diez, en que se apaga la luz, jarana y portazos.
En vista de como está el tema me voy a la cocina a prepararme una infusión y allí paso un rato charlando con otros peregrinos con los que ya llevamos días coincidiendo. La cocina está impecablemente recogida.
Regreso a la habitación donde me recibe un concierto de ronquidos, me meto en la cama y creo que no llego a contar hasta diez, pues me quedo inmediatamente dormida. Me despiertan peregrinos que silenciosamente se ponen en marcha, enfoco con la linterna mi rleoj, ¡no me lo puedo creer, son las cuatro menos diez de la madrugada!,
Restaurante La Campana: Menú 10 E.
...y hoy: Señales jacobeas del Camino.
Realmente el Camino Francés de Santiago está muy bien señalizado, cualquier lugar es bueno para colocar una señal, paredes, puertas, papeleras, en el suelo, en el tronco de los árboles. ..Si en algún momento te sientes desorientado, para y busca la señal, seguro que tienes una muy próxima a ti, si no es así casi merece la pena desandar camino hasta encontrarla.
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