lunes, 15 de noviembre de 2010

ETAPA IX LEÓN - VILLAVANTE

LEÓN - VILLAVANTE (32,7 Km.)
14 de Mayo, sábado


¡Ultreia! .... ¡et suseia!

Salimos del albergue a las 06:45 h. Parece temprano, pero ya muchos peregrinos nos


preceden. Caminamos por la ciudad la temperatura es muy agradable, un termómetro que

encontramos a nuestro paso marca 11º. Seguimos Camino hasta llegar a San Marcos,


impresionante muestra del Renacimiento español. Nos detenemos a admirar la fachada, joya del plateresco, cuya construcción se inició hacia 1515.



Salimos por el puente de San Marcos sobre el río Bernesga, amanece mientras nos dirigimos al


pueblo de Trobajo del Camino que está a poco más de tres kilómetros de León, nos llaman la atención las bodegas, construidas aprovechando pequeños montículos .

La ruta continua con la monotonía de ayer, atravesamos el páramo leonés, pasamos por delante


de la Basílica de la Virgen del Camino, a las 08:25 Este templo se construyó en el siglo XX, en el lugar que ocupaba la antigua iglesia, merece destacarse el grupo escultórico de la fachada obra de Subirats. A mi particularmente no me gusta demasiado.

En ese punto nos decidimos por tomar la variante que pasando varios pueblecitos nos llevará hasta Villar de Mazarife.

Voy un rato charlando con unos vascos, me llama la atención que cuando pasamos junto a otros peregrinos les saludan diciendo: ¡Ultreia!, pienso que es algún saludo en euskera, pero no, me explican que es un antiguo saludo de los caminantes que se dirigían a Santiago, viene del latín, unos decían ¡ultreia! y los otros respondían ¡suseia!, la traducción viene a ser: ¡Ve más lejos!... ¡y ve más alto!

El día se está nublando cada vez más, aunque la temperatura es muy agradable. La ruta de hoy sigue en una aplastante monotonía, la vista, mires por donde mires. se pierde en el horizonte ahora verde, nos entretenemos observando las diferentes plantas que dejamos a nuestro paso, algunas de ellas muy olorosas, yo cojo unas que me gustan especialmente, con raíz, para intentar plantarla en nuestro jardín.


El primer pueblo que atravesamos después de tomar el desvío es Fresno del Camino


Más adelante atravesaremos otro de nombre curioso Oncina de la Valdoncina y más tarde hacia


las diez y cuarto dejaremos atrás Chozas de Abajo Seguimos nuestra ruta hasta llegar a Villar de Mazarife, allí nos comemos los frutos secos mientras decidimos que hacer: ¿quedarnos allí?, ¿seguir hasta Villavante?, buscar el molino del que nos hablaron en Hornillos?. Al final nos decidimos por esta última opción, la verdad es que ya llevamos muchos kilómetros en nuestras botas, pero intentaremos llegar aunque no tenemos muy claro donde está.


A las 13:05 llegamos a Villavante, pueblo que tiene una escuela de campaneros desde 1986. Cada año para el mes de agosto se reúnen campaneros de toda España que con sus repiques hacen las delicias de todo el público que allí se congrega. Preguntamos por el molino y nos dicen que ya estamos muy cerca.

Llegamos al Molino de Galochas a las 13:20. Nos acogen Maxi y Mercedes, un matrimonio encantador, enseguida nos instalan en dos habitaciones y nos anuncian que mientras nos duchamos nos improvisan una comida. Y así es, cuando salimos al comedor ya nos han servido una apetitosa ensalada, un plato con queso y nueces y un pollito a la brasa.

Después de tomar café, voy a ir a descansar pues hoy estoy muerta, pero lo pienso mejor y me voy al prado que se extiende ante la casa a tomar el sol que ahora luce, pues el tiempo ha mejorado mucho. Tumbada sobre mi toalla veo a más peregrinos que van llegando, mi marido y


nuestro amigo están apaciblemente sentados leyendo, y yo viendo como se seca mi colada me quedo dormida.


Nos dedicamos toda la tarde a descansar, lo necesitamos pues hoy hemos hecho más de treinta kilometros.


Pasamos la tarde entre el prado y la casa, que por cierto es muy bonita, acogedora, y está muy


bien decorada. Estoy un buen rato conectada a Internet hasta que hacia las nueve bajamos a


cenar, nos han preparado ensalada, tortilla de patata, cordero y fruta, ¡todo está riquísimo!. Luego nos sentamos un rato con Mercedes y Máxi a charlar ante el hogar, nos explican la historia de como compraron el molino, la decoración, la puesta en marcha. Toda una aventura, han sido valientes y su apuesta les está saliendo bien, además viven tranquilos en un lugar privilegiado. Hacia las 22:30 h. nos vamos a dormir.

Molino Galochas: Una habitación doble, una simple, comidas, cenas, y desayuno para tres: 180 E.

======================

...y hoy: Señales del Camino



No hay comentarios:

Publicar un comentario